Es el arte sutil de utilizar el poder de los aromas para enriquecer nuestras vidas. Con unas simples notas aromáticas podemos llegar a la estabilidad emocional, física y mental, logrando de esta manera bienestar y salud en todos los niveles de nuestro ser. Pudiendo ayudar a aliviar el estrés, el cansancio, los pequeños dolores de cabeza hasta lograr llevar bienestar a personas que sufren alguna enfermedad incurable.
El objetivo principal es la autosanación, es decir la conexión entre la mente, el cuerpo y sus emociones.
Las antiguas civilizaciones desde Asia hasta América observaron a los animales y la interacción de estos con las plantas, de ahí aprendieron los beneficios que aportaban cada especie vegetal.
Con la llegada de la Revolución Industrial, la aromaterapia se desprestigió en todas las culturas del mundo, debido a la entrada y avances de la medicina alopática; sin embargo, con el paso de los años, las necesidades de la gente por conseguir tratamientos que no presentes efectos secundarios
La Aromaterapia es un arte y una ciencia que utiliza aceites esenciales extraídos de varias partes de las plantas y de los árboles. Estas sustancias líquidas naturales y aromáticas a menudo consideradas como la “fuerza vital” o el “alma” de las plantas, están dotadas de una amplia gama de propiedades terapéuticas.
Los aceites esenciales ayudan a equilibrar nuestros estados mentales negativos, como preocupaciones y los temores, que afectan negativamente a nuestro sistema inmunológico y, en última instancia provocan serias enfermedades.
"La ciencia le ha dado validez a la Aromaterapia"
Al analizar el poder germicida de los aceites esenciales. La acción de estos sobre los microorganismos es que inhiben ciertas funciones metabólicas de ellos, tales como el crecimiento y la multiplicación, destruyéndolos eventualmente.
Cuando se ingiere algún “químico sintético” (medicamento), el cuerpo monta una reacción defensiva, que constituye una agresión, cuando existe una enfermedad la medicina alopática responde una agresión con otra agresión, creando un estado de guerra sumamente perjudicial para el campo batalla ¡el cuerpo humano!, perdiendo de esta manera el equilibrio o homeostasis.
"Los aceites esenciales son producto de vida, por lo cual los microorganismos no muestran resistencia a ellos"
Su composición química depende de tantos factores que resulta imposible lograr exactamente el mismo aceite dos veces. Según investigaciones los microorganismos no muestran resistencia alguna a los aceites esenciales, sin embargo, algunos microorganismos pueden modificarse y presentar alguna resistencia, pero a un grado menor que el existe ante algunos antibióticos sintéticos. esto tiene sentido puesto que los aceites esenciales tienen estructura más compleja y ninguna reconstrucción sintética es capaz de construir una replica total de un producto natural.
Dependemos de las plantas absolutamente en todos los órdenes – alimentos, energía y oxígeno-, existiendo una relación complementaria entre plantas y humanos. Por eso es por lo que las plantas no son agresivas contra el cuerpo (sólo su abuso puede ser agresivo).
"Los aceites esenciales desempeñan un papel clave el la bioquímica de la planta actúan como: hormonas, reguladores y mensajeros, enzimas, coenzimas, etc.".
Actúa en diferentes niveles.
"Ingresan por el sistema olfativo hasta la parte más profunda del cerebro".
Las moléculas aromáticas de los aceites esenciales ingresan por el sistema olfativo y actúan directamente a nivel subconsciente; el nervio olfativo está conectados directamente a la parte más primitiva del cerebro, el sistema límbico e hipotálamo, estos son muy antiguos y responsables de emociones, sentimientos, instintos e impulsos. También almacenan los contenidos de la memoria y regulan la liberación de las hormonas. Por esto los olores, pueden influir en nuestro comportamiento y funciones corporales. Esta recepción olfativa es en su mayoría inconsciente. Después de este primer paso, llegan a la corteza cerebral y se torna consciente.
Estos centros cerebrales perciben olores y tienen acceso a recuerdos que nos traen a la memoria personas, lugares, situaciones relacionadas con estas sensaciones olfativas.
"Se dice que Sistema olfativo tiene la puerta abierta al cerebro"
El olfato es mucho más inmediato que cualquier otro sentido, por ejemplo, el tacto o el gusto, ya que las moléculas deben viajar por todo el cuerpo a través de las neuronas y la espina dorsal antes de llegar al cerebro, mientras que la respuesta olfativa es inmediata y se extiende directamente al cerebro, debido por lo cual al sistema olfativo se le dice que tiene puerta abierta en el cerebro.
Las moléculas de los aceites esenciales tienen un impacto en nuestro cuerpo y por ser liposolubles tienen la capacidad de entrar a la célula misma y proveer un efecto terapéutico desde la misma, Por su afinidad a las grasas, pueden entrar a través de las capas de la piel para llegar al torrente sanguíneo; donde efectuarán su efecto terapéutico.
Son diversos los beneficios que nos aportan los aceites esenciales a nuestro cuerpo como:
Los aceites esenciales son más o menos fluidos (algunos son sólidos a la temperatura ambiente Resinas).
La química de los aceites esenciales es bastante compleja. Varia durante el año y a través de este. Depende de la parte de la planta que se destila (raíz, madera, corteza, hojas, tallo, flor, semilla) de la variedad que se trate, de la tierra e incluso del clima, estas variaciones de composición es la que se le denomina Quimiotipo.
Los constituyen básicamente de terpenos, sesquitermenos, esteres, alcoholes, fenoles, aldehídos, acetonas, ácidos orgánicos. Contienen vitaminas, hormonas, antibióticos y/o antisépticos.
"Los Aceites Esenciales remedian las causas de la enfermedad"
Aunque puede aliviar los síntomas, la aromaterapia tiende primeramente a remediar las causas de la enfermedad. La acción terapéutica más importante de los aceites esenciales consiente en fortalecer los órganos y su funcionamiento, así como los mecanismos de defensa del organismo. Los Aceites Esenciales no realizan el trabajo que le corresponde al cuerpo, sino que ayudan a éste a que haga su propio trabajo, y por ello no debilitan al organismo. Su acción es acrecentada por todas las terapias naturales que tienden a restaurar la vitalidad del individuo.
Son mezclas de aceites esenciales simples, que al ser mezclados con otros aceites esenciales se potencian el efecto terapéutico. Por ejemplo: el aceite esencial de Lavanda posee propiedades tranquilizantes y al ser mezclado con Aceite Esencial de Sándalo y A.E de Ylang Ylang se potencializa su efecto calmante.